
Solía en algunas noches en sueños caminar por esos bosques donde las hadas son felices y donde esparcen el fulgor de sus sonrisas. Pero al intentar batir sus alas se daba cuenta que ya no podía volar,cuanto dolor le causaba
esforzarse y no lograrlo.
Pero en una de esas noches de peregrinaje conoció a otras hadas y seres mágicos que comenzaron a expandir su magia en el aire, ayudando a curar sus heridas.
Pero lo que comenzó a darle mayor fuerza fue la dulzura que encontraba en la mirada de ese tierno y genuino amor que jamás la abandonó, que acompañó sus pasos tristes por el bosque, que le tomo la mano cuando estaba cansada de tanto intentar volar.
Un amor que supo de tormentas, adversidades, dificultades y encuentros a escondidas en el bosque.
Hoy la pequeña hada tiene las alas integras, fuertes, sanas, pero no se anima a volar.
Dulce hada del aire toma impulso, enfréntate al mundo por que ya puedes volar y por que el mundo es tuyo, solo te tienes que animar
Dedicado a una gran hada amiga, para Andy, alguien que admiro y respeto